Los presos políticos del gobierno
venezolano, los utiliza el régimen, como rehenes (sobornos) para negociar con
ventaja, respecto a aspectos políticos importantes de difícil situación para el
gobierno. Al igual que lo hacen o hacían las FARC y el ELN en Colombia, la
modalidad ha sido copiada por el gobierno totalitario de Nicolás Maduro. La
diferencia de esta nueva modalidad se basa en que las guerrillas lo hacen o lo
hacían por dinero y otras razones, mientras que el gobierno lo utiliza como un
soborno criminal, para obligar a la oposición a sentarse a una mesa de diálogo,
para demostrarle al mundo, que es un gobierno humanitario y pacífico que
contribuye con las soluciones de los problemas del país, haciéndose ver como un
cordero. Hasta la misma iglesia católica cayo en la trampa por ingenua.
El Director del Foro Penal Venezolano,
Alfredo Romero, presentó unas cifras que demuestran la estrategia criminal del
gobierno con los presos políticos, convertidos en rehenes. En el 2016 liberaron
a 43 presos políticos, recluidos varios años, y encarcelaron a 56 por protestas
políticas, manteniendo un balance de presos políticos o rehenes, en positivo a
su favor. Esto, para tener material humano para negociar. Es de destacar, que, a
los presos políticos, los mantienen presos sin pruebas jurídicas ni testigos
reales, con la treta de suspender reiteradamente los juicios por alguna causa vana
del juez de la causa. Es decir, bajo constante tortura mental, por simple
maldad. Los guerrilleros y tratantes de personas se quedan cortos ante la
barbarie y tretas del gobierno.
Como lo califica el doctor Alfredo
Romero, el gobierno de Venezuela, es una dictadura declarada. Sobre eso no
existen dudas. Son muchas las acciones del gobierno que lo demuestran a diario.
En base a este argumento, se espera de la MUD, máximo representante de la
oposición, haga una revisión de su agenda de trabajo, de manera tal de darle un
giro radical a las próximas acciones a seguir, que obliguen al gobierno a aceptar
la vía electoral para dilucidar el futuro de Venezuela. De mantener su postura
de dictadura, habrá que cambiar la lucha contra el gobierno, dándole el trato
correcto de dictadura, para que los presos políticos, llenen los estadios, como
lo hizo Pinochet en Chile y Fidel Castro en Cuba. Venezuela está resteada en no
aceptar al comunismo, como sistema de gobierno, puesto que el 80% de los
venezolanos lo rechaza por ser un fracaso donde se instale.
Los ingleses que gobernaban la India,
fueron expulsados de ese territorio por la resistencia heroica de su pueblo,
sin la necesidad de usar armas de guerra.
El muro de Berlín y el comunismo en Europa, cayeron sin armas de guerra,
por la presión de los decididos pueblos oprimidos por la URSS. El Apartheid de
South África, cayó por la grandiosa resistencia, de su valiente pueblo. Son
muchas las dictaduras comunistas y otras en el mundo, que han caído sin la
necesidad de declararles la guerra con el uso de las armas. Solo es necesario que
un alto porcentaje de su población que lo desee, y esté dispuesta a actuar.
Sabemos que a este gobierno lo protegen
países comunistas del mundo, en especial China y Rusia. Es cierto que siguen
comprando armas que no necesitan, y les permiten enormes ganancias a sus
proveedores. Sabemos que existen gobiernos latinoamericanos, como Cuba,
Nicaragua Bolivia y Ecuador, etc., que alcahuetean y protegen a Nicolás Maduro.
No obstante, con todo ese apoyo del comunismo y socialismo armados, la
dictadura de Venezuela, tiene los días contados. Localmente tiene un rechazo
local absoluto. La oposición, tiene la razón, y una fuerza moral con apoyo internacional superior al apoyo comunista, que le respalda y le da ánimos. La
constitución de la república que ellos tanto defienden, nos respalda y nos da
fuerzas extra, para continuar con ésta lucha hasta lograr la victoria.
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